Sí, sé que muchas veces habéis escuchado eso de que el nuevo Messi está de camino, cuando resulta que la estrella argentina explotó hace pocos años. Evidentemente, para ser considerado como el nuevo mejor jugador del mundo hay que ser muy bueno, y más si tienes sólo 15 años (aunque parece que tenga 25). Ese es el caso de Jean-Marie Dongou, una de las grandes perlas de la cantera del FC Barcelona.
Es cadete de segundo año y ya sabe lo que es marcar un buen puñado de goles con el Cadete A azulgrana, equipo dirigido por Francisco Javier García Pimienta, con el Juvenil B, entrenado por Sergi Barjuan, y con el Juvenil A, a cargo de Òscar García. El pasado fin de semana pulverizó al Espanyol con un ‘hat-trick’ a domicilio, algo que ha servido para consagrar a este futbolista camerunés que viene desde atrás pidiendo paso.
Una de las características fundamentales de Dongou es su potencia física. Es rápido, intuitivo, veloz y con una gran facilidad para la definición. Pep Guardiola todavía no ha preguntado por él, pero no nos extrañaría que la temporada que viene se ejercitara en más de una ocasión con el primer equipo. Su proyección es espectacular, pero de momento todo hay que cogerlo con pinzas y él tiene que seguir con los pies en el suelo, pues de lo contrario nunca llegará a ser nadie. El mejor ejemplo que puede tomar es el de Messi, pero nunca para intentar parecerse al argentino.