Menudo fichaje rana el de André Gomes. Los últimos jugadores que han llegado a Barcelona procedentes del Valencia han ofrecido un rendimiento bastante pobre, y eso que no han sido precisamente baratos. Por Jérémy Mathieu pagaron 20 millones de euros, por Paco Alcácer pagaron 30 millones y por André Gomes desembolsaron 35. ¿Y qué ha pasado? Que ninguno de los tres ha triunfado.
Otro ex del Valencia que fracasa
Mathieu se marchó con la carta de libertad bajo el brazo y Alcácer es más transferible que todas las cosas, sobre todo después de enterarnos de que José Arnáiz, del filial, está en condiciones de arrebatarle los pocos minutos que iba a tener a lo largo de la temporada.
El otro que lo tiene crudo es André Gomes. Juega muy poco y Ernesto Valverde ya le ha dicho que no cuenta con él. Además, cuando Rafinha se recupere caerá un puesto más en su lista de prioridades, así que debería hacer las maletas cuanto antes. Debe aceptar que su sueño de triunfar en el Barça se ha terminado.
La Juventus busca una cesión y en la Premier negocian su fichaje
El problema es que no llegan demasiadas ofertas en firme. La Juventus lleva varios años siguiéndole, pero por ahora se contenta con una cesión. Se ha dado cuenta de que su rendimiento ya no es el que era y no quiere pillarse los dedos.
En el Camp Nou no ven con malos ojos que se marche cedido a la ‘Vecchia Signora’. Allí podría tener más protagonismo, aunque en mi opinión tampoco tiene hueco. De esta forma le recuperarían para volver a formar parte de la plantilla o para buscar un traspaso elevado.
Dicen que en la Premier League hay un equipo que ha preguntado por su precio de compra y está dispuesto a asumirlo si le cuadran los números. El Barça, como es lógico, no lo venderá por menos de 30 millones para no despertar la ira de los socios, que bastante enfadados están ya con Josep Maria Bartomeu. Su ficha salarial no es de las más elevadas de la plantilla y eso les permite ser pacientes.