Sorprendente lo que se vivió anoche en el Estadio brasileño del Náutico. El partido, que enfrentaba a los locales y al Botafogo, se calentó cuando André Luis, defensor visitante, fue expulsado por doble cartulina amarilla. El jugador se marchó del campo haciendo gestos despectivos hacia la grada y se sentó en el banquillo. Entonces la policía decidió intervenir. Unos 20 agentes rodearon al jugador y el partido estuvo 12 minutos parado porque jugadores del Botafogo se enfrentaron a la policía para liberar a su compañero.
Tras ese tiempo, el jugador fue arrestado y llevado a comisaría por «comportamiento agresivo al patear una botella de plástico contra la multitud y por desobediencia a la autoridad». Junto a él, fue a parar también Bebeto de Freitas, presidente del Botafogo, por desobediencia a la autoridad.
Finalmente ambos han sido puestos en libertad con cargos. Dieguinho, uno de los compañeros de André Luis, acusó a la policía de utilizar ‘sprays’ contra sus compañeros:
Los agentes están para defendernos a nosotros y a los árbitros, pero en lugar de eso nos han golpeado.