El Bayern de Múnich arrolló al Milan para colarse en la final de la Audi Cup. El conjunto alemán se llevó el partido por un 4-1 que puede ser algo engañoso si tenemos en cuenta que la mayoría de los goles se realizaron en los últimos minutos del partido. Eso sí, no deja de ser un resultado abultado en un partido que tenía que haber sido mucho más igualado de lo que fue.
Los bávaros salieron mucho más enchufados al terreno de juego del Allianz Arena y pronto empezaron a marcar diferencias. Thomas Müller, un joven canterano de 19 años, abrió la lata en el minuto 11. El Milan no cambió su forma de jugar y siguieron encerrados atrás esperando algún contraataque letal. Este no llegó y con el 1-0 los futbolistas se marcharon al descanso.
La segunda parte fue más de lo mismo. Los hombres de Louis Van Gaal se volcaron ante la portería de Storari y los italianos a duras penas llevaban peligro. A falta de 10 minutos para el final, Schweinsteiger animó el partido con un gran gol. Cuando parecía que el partido estaba sentenciado, Pirlo dio vida a los suyos tan sólo un minuto después.
Los últimos minutos fueron de desconcierto milanista. El canterano Saer Sene marcó el 3-1 arpovechando un rechace en el 89 y Müller hizo su doblete en el tiempo de descuento para que los aficionados alemanes hicieran la ola. Ahora les espera el Manchester United en la final, pues los ingleses se deshicieron de Boca Juniors por 2-1.