El Madrid se despide de la Décima en los penaltis


No habrá ningún finalista español en Múnich. Anoche el Real Madrid no pudo con el Bayern de Múnich y terminó cediendo en los penaltis. No tuvo suerte y tendrá que esperar a otro año para ganar la Décima.

El partido terminó con idéntico resultado que en la ida: 2-1. Los blancos empezaron muy fuerte pero poco a poco se fueron diluyendo cuando vieron que ya habían hecho los deberes. Fue entonces cuando apareció su bestia negra.

El primero de la noche lo hizo Cristiano Ronaldo a los seis minutos de partido. El crack portugués transformó un penalti cometido por David Alaba al tocar el balón con las manos. No se puso nervioso y engañó a Manuel Neuer.


Sin tiempo para la reacción del Bayern, CR7 amplió la diferencia y colocó al Madrid en la final de forma virtual. Lo hizo tras aprovechar un gran pase de Karim Benzema para definir con mucha calidad.

A partir de ese momento los de José Mourinho cambiaron el chip por completo. Se convirtieron en un equipo defensivo, sin ideas en el centro del campo para controlar el balón. Los alemanes, que no se arrugaron en ningún momento, gozaron de sus mejores ocasiones de gol hasta que llegó el innecesario penalti de Pepe a Mario Gómez.


El central madridista llegó tarde a la marca y se abalanzó sobre el delantero hispano-alemán. Le derribó y el húngaro Viktor Kassai señaló los once metros sin pensárselo. Arjen Robben se encargó de batir a Iker Casillas con un disparo ajustado que llegó a tocar el de Móstoles.

La segunda mitad fue bastante más aburrida que la primera. Los dos equipos decidieron no arriesgar y apostaron por esperar un error del rival que nunca llegó. Además, las piernas empezaban a flaquear y eso se notaba en algunos jugadores.

La prórroga fue más de lo mismo multiplicado por tres. El cansancio era evidente y las ganas de llegar a los penaltis también, sobre todo por parte de los jugadores del Bayern.


En la tanda de penaltis empezaron fallando Cristiano Ronaldo y Kaká. Sin embargo, Iker Casillas paró también dos penaltis y le puso algo de emoción a la tanda. Todo hasta que Sergio Ramos mandó el balón a las nubes de Madrid, dejando claro que los penaltis están hechos para jugadores técnicos. Mala decisión.

Así las cosas, la final del próximo 19 de mayo se la disputarán el Bayern y el Chelsea. Los alemanes son favoritos porque juegan en casa y porque los ingleses tienen cuatro bajas importantes: Raul Meireles, John Terry, Ramires y Branislav Ivanovic. Eso sí, por parte del Bayern tampoco estarán Luiz Gustavo, David Alaba y Holger Badstuber.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.