Tremenda la temporada que está haciendo el Mónaco, que está más cerca que nunca de lograr un triplete histórico. Los de Leonardo Jardim no salieron a defender el 2-3 obtenido en Dortmund y volvieron a superar a los alemanes, esta vez con un 3-1 que deja claras cuáles son sus intenciones en esta Champions League.
Ahora mismo son la Cenicienta del sorteo de semifinales, pero visto lo visto sobre el césped no me atrevería a celebrar un emparejamiento con ellos.
Mbappé está muy enchufado
El Mónaco se adelantó en el minuto 3 gracias a un error de Roman Bürki, un portero que en mi humilde opinión no da la talla. No acertó a blocar un potente disparo desde fuera del área y Kylian Mbappé lo aprovechó para hacerse con el rechace rematando de primeras.
El Borussia Dortmund trató de reaccionar y a punto estuvo de hacerlo por mediación de Nuri Sahin. El exmadridista envió el balón al poste en un lanzamiento de falta magistral que no entró por muy poco.
Falcao no faltó a su cita con el gol
El Mónaco, lejos de sentirse intimidado por ese libre directo, hizo el 2-0 que parecía sentenciar la eliminatoria. Esta vez fue Radamel Falcao quien superó a Bürki rematando de cabeza un centro teledirigido de Thomas Lemar, otro de los jóvenes talentos de este Mónaco que no tardará en hacer las maletas para jugar en un grande de Europa.
Todo eso pasó antes del minuto 20 y los de Tomas Tuchel se quedaron helados. La remontada era muy complicada, aunque hubo un conato de reacción tras el descanso. Marco Reus recortó distancias rematando un buen centro de Ousmane Dembélé, que apuró la línea de fondo antes de buscar a un compañero.
3-1 definitivo en el minuto 81
Las opciones de remontada se evaporaron cuando Valère Germain entró en acción. Llevaba muy poco sobre el terreno de juego y convirtió en oro el primer balón que tocó para culminar un contraataque dirigido por Lemar, que anoche estuvo en casi todas.
El Mónaco no es un chollo para semifinales
Lo dicho, el Mónaco no va a ser un caramelo para ningún equipo. Tienen mucho gol y la juventud de su plantilla puede ser una ventaja a la hora de afrontar la típica eliminatoria que se va a la prórroga. Eso sí, también es verdad que la veteranía es un grado en según qué partidos de alto voltaje.