Todos sabemos que John Terry no es una persona ejemplar, pues fuera de los terrenos de juego le fue infiel a su mujer en varias ocasiones, algo imperdonable. Sin embargo, lo que desconocíamos era que su padre había traficado con cocaína, por lo que tampoco es un espejo en el que mirarse. Al parecer, Edward Terry se declaró culpable por tráfico de cocaína en 2009 después de que en noviembre fuera detenido por ese delito.
A sus 56 años, Edward acudió hoy al juzgado de Basilidon, en Essex, para admitir su responsabilidad en la distribución de esa droga. En estos momentos se encuentra en libertad bajo fianza y cuenta con el apoyo de su abogado, Neil Saunders. Éste dice que su cliente fue un objetivo de los periodistas después de que fuera filmado distribuyendo cocaína al que resultó ser un reportero oculto que se encontraba en un bar de vinos en la localidad de Chafford Hundred, en Essex.
La familia Terry conocerá la sentencia definitiva el próximo 1 de junio, una semana y media antes de que empiece el Mundial de Sudáfrica. Si finalmente va a la cárcel, puede que eso sea un mazazo demasiado duro para John Terry, quien podría ser condenado a la suplencia si Fabio Capello considera que no está anímicamente para jugar.