La selección española sub-17 cumplió aunque con más apuros de los esperados. Los nuestros tenían que ganar a Irlanda para clasificarse como primeros del grupo B y acceder así a las semifinales evitando a Turquía, la anfitriona. Se adelantaron los irlandeses pero en la segunda mitad fueron capaces de darle la vuelta al partido con un resultado final de 3-1. Ahora, tocará dar la talla contra Holanda en semifinales.
Hourihane adelantó a los británicos al cuarto de hora de partido aprovechando un error del defensor Pulido que se quiso anticipar. Luego, encaró a Gaztañaga y no desaprovechó una de las pocas ocasiones que tuvieron en todo el partido. 1-0 y lo españoles nerviosos por un tanto que no se esperaban. La reacción no llegaba puesto que las ocasiones se podían contar con los dedos de una mano. Parecía que el descanso vendría bien a los Santiesteban para recomponerse anímicamente.
Y así fue. La decisiva entrada de Rochina y Canales dio otro aire en ataque a la selección española. Rochina logró anotar los dos primeros tantos. El primero de ellos a los 6 minutos aprovechando un jugadón del atlético Keko. El segundo llegó gracias a un buen lanzamiento del jugador del Barcelona que Hanley se comió con patatas. 2-1 y mucha tranquilidad.
La pareja Rochina-Keko continuó funcionando y un pase del azulgrana fue aprovechado por Keko para marcar con mucha clase el 3-1 definitivo. Tres puntos más y el equipo de Santiesteban que se cuela con 7 puntos como primero de grupo en semifinales. Eso sí, Holanda no será una perita en dulce como Irlanda…