Tela marinera. Lo de Marco Asensio va muy en serio. El de Palma de Mallorca está imparable y anoche aprovechó la oportunidad que le dio Zinedine Zidane partiendo desde el once inicial. Nadie se acordó de Gareth Bale, o en todo caso se acordaron del galés para recomendarle que lo mejor que puede hacer es irse al Manchester United.
En el partido de ida de la Supercopa de España ya nos deleitó con un golazo en el Camp Nou, pero es que ayer hizo lo mismo ante un Barça que se hundió en el minuto 4 al ver cómo ponía el balón en la escuadra. Fue una obra de arte de las que no se olvidan así como así.
No se lo pensó demasiado
Ocurrió en una jugada polémica, ya que Jordi Alba estaba reclamando que el saque de banda era para ellos, y no para el Real Madrid. Eso lo aprovechó Dani Carvajal para poner el balón en juego rápidamente buscando a Karim Benzema.
Samuel Umtiti se anticipó y pudo despejar el cuero para que su compatriota no lo controlara, pero éste cayó en los pies de un Asensio que lo controló con la calidad que le caracteriza antes de armar su pierna para sorprender a Marc-André ter Stegen.
El portero alemán del Barça no pudo hacer como el pasado domingo. Ni siquiera voló esta vez para evitar el golazo del ex del Espanyol. La puso en la escuadra con una potencia descomunal desde muy lejos, logrando que Zidane sonriera con cara de estar pensando que tendrá un buen lío a partir de ahora con él y con Bale.
Prohibido decir que fue suerte
No es la primera vez que nos deleita con un gol así y no será la última. En la Supercopa de Europa del año pasado ya dejó muestras de su calidad ante el Sevilla. Le sabe pegar con potencia y colocado, algo que está al alcance de muy pocos. Y que no digan que fue suerte, porque ya van unos cuantos en su corto pero asombroso currículum.