La Juventus quiere reforzar su centro del campo contratando a un jugador técnico. No les basta con Miralem Pjanic, que está haciendo una buena temporada, y quieren al típico futbolista que puede jugar en la mediapunta y que no tiene problemas a la hora de caer en banda.
El preferido es Isco, pero el Real Madrid por ahora se niega a traspasarlo. Además, tiene otras novias como el Tottenham, que podría pujar muy fuerte por el malacitano en el próximo mercado de invierno. De ahí que hayan fijado su punto de mira en Santi Cazorla, cuyo contrato con el Arsenal expira el próximo 30 de junio de 2017.
La grave lesión que sufrió le dejó sin renovación
El asturiano es feliz en Londres y no le disgustaría continuar. Lo malo es que todavía no ha llegado a un acuerdo para extender ese compromiso que se congeló cuando sufrió una grave lesión a finales de 2015, la misma que le dejó sin Eurocopa. La última renovación, todo sea dicho, la firmaron en julio de 2015.
Wenger no tendrá la última palabra
Arsène Wenger le considera un hombre importante y si por él fuera renovaría, pero me temo que las decisiones que toma el técnico francés han dejado de ser importantes, o como mínimo ya no son tan trascendentales como en los últimos 20 años. El club quiere contratar a otro entrenador y eso hace que las renovaciones ya no solo dependan de su opinión.
Un buen sueldo y la posibilidad de jugar en Italia
Según Calciomercato, la Juventus irá a por él ofreciéndole una ficha superior a la que cobra en el Emirates Stadium. El hecho de no pagar ni un solo euro en concepto de traspaso hace que los transalpinos puedan ser generosos como el ex del Villarreal, a quien no sabemos si le hace ilusión probar suerte en otra liga como la Serie A.
Sea como sea, el Arsenal tendrá que darse prisa si quiere retener a Cazorla. No hay que olvidar que a partir del 1 de enero será libre para negociar con cualquier club.