Quién se lo iba a decir a Álvaro Morata. La temporada pasada apenas tenía minutos porque vivía a la sombra de Karim Benzema, pero las cosas han cambiado mucho desde que fichó por la Juventus. Ha pasado a ser titular indiscutible y ha demostrado que es capaz de marcar goles tan importantes como el que logró anoche en el Santiago Bernabéu.
Cosas que pasan por no valorar la cantera
No lo celebró porque es merengue de toda la vida. Se contuvo tras igualar el choque dándole la clasificación a un equipo que volvió a demostrar que tiene oficio para dar y regalar. Es una pieza más de un engranaje perfecto confeccionado por Massimiliano Allegri. Un engranaje que forma parte de una máquina que no es tan eficiente como la de Luis Enrique, pero seguro que en Berlín van a dar mucha guerra por entrega y por despliegue táctico.
Partidazo del ‘9’ de la Juve
La calidad la pondrán los Carlos Tévez, Paul Pogba y compañía. El francés fue titular como se sabía y no hizo un mal partido, pero el mejor de la Juventus fue Morata por varias razones. Peleó como suele ser habitual en él, vino a recibir cuando sus compañeros necesitaban una salida y fue capaz de crear peligro de tres cuartos de campo hacia arriba. Hace su trabajo muy bien para tener 22 años.
Cristiano hizo el 1-0
A todo esto el Madrid se adelantó en el marcador gracias a un penalti muy inocente cometido por Giorgio Chiellini. El central italiano derribó a James Rodríguez en el área y el sueco Jonas Eriksson no tuvo ninguna duda a la hora de señalar el punto de penalti. Allí Cristiano Ronaldo no falló como sí lo hizo el pasado sábado ante Diego Alves. Esta vez estaba delante Gianluigi Buffon, que se movía de lado a lado de la portería para ponerle nervioso. Sin embargo, el luso disparó centrado para engañarle y logró lo que se proponía.
A partir de ese momento el Madrid dispuso de alguna que otra ocasión para hacer el segundo, pero no era la noche de hombres como Benzema, Bale o Cristiano. Demasiadas ocasiones y demasiados errores. Sobre todo por parte de Bale, que en la segunda parte desperdició lo que no está escrito.
El empate que nadie esperaba
Quien no falló fue Morata en el minuto 57. Se hizo con un balón que quedó muerto en el corazón del área blanca y lo controló con el pecho con mucha serenidad. Acto seguido disparó con fuerza para superar a un Iker Casillas que ayer estuvo más fino de lo que suele ser habitual últimamente. De hecho, el de Móstoles mantuvo a los suyos con vida minutos más tarde malbaratando una ocasión clarísima de Claudio Marchisio.
No lo celebró por respeto a la que fue su afición, pero por dentro debió estar repleto de alegría. Acababa de marcar un gol muy importante para la Juventus. No hay que olvidar que no jugaban una final de la Champions League desde la temporada 2002-2003, que es cuando consiguieron su última ‘Orejona’ ante el Milan.
Ovación para Pirlo
A partir de ese momento los de Carlo Ancelotti lo intentaron con más corazón que cabeza. Colgaron muchos balones al área que no llevaron demasiado peligro, entre otras cosas porque Allegri sustituyó a Andrea Pirlo para dar entrada a otro Andrea menos virtuoso con el balón. Me refiero a Barzagli, que no se llevó la ovación del Bernabéu como sí se la llevó Pirlo. Se nota que es una afición que sabe reconocer a los buenos jugadores.
En la Champions no hay rival pequeño
Con el 1-1 terminó el partido y los jugadores de la Juventus explotaron de alegría sobre el césped del Bernabéu. Todo el mundo decía que el Madrid lo tenía muy fácil desde que se hizo el sorteo de semifinales, pero a la Vecchia Signora nunca puedes infravalorarla, y menos cuando ha vuelto a ganar la Serie A con tanta contundencia.
¿Favorito para la final? No creo que el Barça se pasee, pero hoy por hoy es el mejor equipo de Europa y debería ganar apoyándose en su tridente. Si Leo Messi, Neymar y Luis Suárez tienen el día, para la Juventus será casi imposible ganar.
Fotos del Madrid – Juventus
