Icono del sitio Liga Fútbol

Portugal elimina a Polonia en los penaltis y estará en semifinales

Rui Patricio
Anoche hablaba con un portugués por WhatsApp y le felicitaba por el pase a semifinales de la Eurocopa de Francia. Eso sí, le dije que era increíble que hubieran llegado tan lejos sin haber ganado ninguno de los cinco partidos que han disputado en los 90 minutos reglamentarios. ¿Cuál fue su respuesta? «Tampoco hemos perdido ninguno de los cinco partidos».

Razón no le falta, desde luego. El mérito de Portugal está siendo su capacidad de supervivencia, su capacidad para superar las adversidades y seguir con vida cuando más de uno la daba por muerta. No están practicando un fútbol exquisito, pero de momento están ahí, a un paso de la gran final que se jugará en París el 10 de julio.

Sin freno y con mucha confianza

Da la sensación de que van de menos a más, de que le están pillando el gustillo al torneo y no les importa sufrir. Y eso que tuvieron la suerte de ir a parar a un grupo más parecido al de una fase de clasificación que al de una fase final de la Eurocopa. Solo faltaban Liechtenstein y San Marino.

Confirmado: Cristiano desaparece en los partidos importantes


Los hombres de Fernando Manuel Costa Santos, capitaneados por un Cristiano Ronaldo que volvió a desaparecer como suele ocurrir en los partidos importantes, se encomendaron a la necesidad de ir a por el empate después de que Robert Lewandowski abriera el marcador en el minuto 2 aprovechando una fantástica asistencia de Grosicki. El jugador del Rennes fue más listo que Cédric, que no midió bien y se tragó el bote del balón. Tenía las ideas claras desde que recibió el esférico y se lo puso a su capitán para que acabara con su sequía colocando plano el interior de su bota derecha. Poco pudo hacer Rui Patrício para evitar el gol.

Renato entró en escena

Polonia no imaginaba un escenario tan propicio, así que cedió el balón a Portugal y se dedicó a esperar atrás. De vez en cuando la tenían y se acercaban a la portería rival, pero se sentían cómodos en las trincheras y no querían ser partícipes de un partido loco, de un correcalles que no les favorecía.

El empate de Portugal llegó en el minuto 33. Renato Sanches, titular con sus 18 añitos, recibió un pase de Nani y no se lo pensó demasiado a la hora de armar su pierna izquierda. Tuvo la suerte de que su disparo golpeó en el cuerpo de Grzegorz Krychowiak y eso hizo inútil la estirada de Lukasz Fabiański, que voló sin llegar a su objetivo.

Pocas ocasiones claras

El partido se puso precioso y se esperaban más goles antes del final. Sin embargo, el miedo a perder y la falta de acierto evitaron que el marcador se volviera a mover. Lo mismo sucedió en la prórroga, donde se notó el cansancio, así que el pase a semifinales se decidió en la tanda de penaltis, donde Polonia había dejado fuera a Suiza en los cuartos de final.

Blaszczykowski se topó con Rui Patrício

El único jugador que falló fue Jakub Blaszczykowski, a quien no se le puede reprochar absolutamente nada. El centrocampista de la Fiorentina ha hecho una gran Eurocopa y su penalti no estaba mal lanzado. Otra cosa es que Rui Patrício adivinara su intención para sacar una manopla que vale su peso en oro. La faena se encargó de rematarla Ricardo Quaresma, que volvió a ser el elegido. Por eso Cristiano fue a abrazarle cuando los periodistas disparaban sus cámaras a todo trapo, no vaya a ser que no salga en las crónicas de hoy…

Salir de la versión móvil