Tragedia de las grandes la que ha sucedido en Irak. Heidar Kazem, delantero centro del Sinyer, ha muerto en el hospital tras sufrir graves heridas por culpa de los disparos que un aficionado del equipo contrario, el Al Buhayrat, le propinó. Al parecer, Kazem marcó un gol y el espectador sacó su arma y le disparó en la cabeza. Ocurrió en Hila, localidad que se encuentra a unos 100 km al sur de Bagdad. La policía iraquí ha podido detener al asesino.