El City de Guardiola está en crisis

Guardiola-preocupado
El Manchester City no se parece en nada a ese equipo invencible de las primeras jornadas. Sus dos últimas derrotas en la Premier League, sumadas al empate que cosecharon en la última jornada de la Champions, me llevan a pensar que Pep Guardiola se puede quedar sin títulos esta temporada.

En Alemania era mucho más fácil ser campeón. Inglaterra es otra historia porque hay varios equipos con mucho presupuesto que te pueden superar. Tienes que jugar bien todos los partidos si quieres sumar los tres puntos, ya que al más mínimo despiste te puede pasar lo que le pasó a los citizens ante el Leicester City el pasado sábado.

No funcionan ni en defensa ni en ataque

Encajaron un 3-0 en la primera mitad y las cosas no cambiaron tras el descanso. De nada le sirvió al equipo de Guardiola tener la posesión del balón. Eran inofensivos en ataque, mientras que el actual campeón de la Premier mordía cada vez que se acercaba al área rival.

Critican que juegue con tres defensas

La prensa inglesa empieza a cuestionar su defensa formada por tres jugadores. Sin embargo, lo que se debería cuestionar es el nivel de alguno de ellos. John Stones, ese joven central tan prometedor por el que pagaron un dineral, no está rindiendo como se esperaba. Ante el Leicester regaló un gol con una cesión desafortunada que aprovechó Jamie Vardy, que se fue a la ducha tras haber marcado uno de esos ‘hat-tricks’ que le suben la moral a cualquier delantero centro.

gol-de-Vardy
Aleksandr Kolarov y Nolito maquillaron el resultado, que fue de 4-2, pero no maquillaron la imagen de un equipo que no está entendiendo la filosofía de Guardiola. Me temo que en Inglaterra es mucho más difícil que el tiki-taka triunfe. El técnico catalán puede que se haya dado cuenta de ello, pero no entiende el fútbol de otra forma y dudo que vaya a cambiar sus planteamientos.

Miedo al fracaso

No acabar la temporada entre los cuatro primeros y pegársela en la Champions antes de llegar a la final sería considerado como un fracaso en el Etihad Stadium, donde han depositado toda su confianza en un hombre al que le están pagando una barbaridad por ganar títulos. Jugar bien siempre se agradece, pero al final todo el mundo se acuerda de las competiciones que has ganado.

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