En Francia, a diferencia de lo que sucede en España, no todas las leyes están hechas para beneficiar a los más ricos. Buena muestra de ello es el gravamen del 75% que están obligados a abonar quienes ganan más de un millón de euros al año en territorio galo. Y claro, como os podéis imaginar, ése es el caso de muchos futbolistas que militan en la Ligue 1: Edinson Cavani, Zlatan Ibrahimovic, Eric Abidal, Ezequiel Lavezzi…
La idea de Hollande sigue levantando ampollas
François Hollande, presidente de Francia, decidió implantar esta ley en 2012, aunque todavía no está aprobada. Fue algo que escandalizó a los que más ingresan, hasta el punto que Gérard Depardieu decidió nacionalizarse ruso para protestar contra esos elevados impuestos. Se trasladó a Saransk (capital de la república de Mordovia) y se reunió con Vladimir Putin para que le otorgara la nacionalidad rusa.
Los equipos de futbol franceses no se van a trasladar a Rusia, pero por lo pronto pretenden convocar una huelga que se llevaría a cabo el próximo 26 de octubre coincidiendo con la undécima jornada. El día 24 se reunirán para decidir si sí o si no.
Más de 100 profesionales afectados
Tanto los de primera como los de segunda, con 115 jugadores y 8 entrenadores cobrando más de un millón por temporada, temen perder competitividad en Europa. En total serían 44 millones de euros los que recaudaría el Estado francés, algo genial para el país que no contenta a los máximos mandatarios de los clubes.
La medida ha sido revisada para que sean las empresas (y no los asalariados) las que tengan que hacerse cargo del impuesto, aunque en ningún caso estarán obligadas a pagar una cantidad que supere el 5% de su volumen de negocio.