Más de un madridista ya está echando un vistazo a lo que cuesta una noche de hotel en Cardiff. El Real Madrid tiene pie y medio en la gran final de la Champions League después de golear al Atlético de Madrid por un contundente 3-0.
Cristiano Ronaldo fue el héroe de la noche con un ‘hat-trick’. El portugués volvió a demostrar que su voracidad no tiene límites y se desenvolvió como pez en el agua cada vez que pisaba el área rival. Jugó por banda, pero el daño lo hizo por el centro.
El Atlético no estuvo a la altura
El Atlético estaba obligado a firmar un partido perfecto para llegar con muchas opciones al duelo de vuelta. El Cholo Simeone apostó por su once de gala con la excepción de Juanfran, que se perdió el encuentro por lesión. Su lugar lo ocupó Lucas Hernández, al que se le encomendó la difícil misión de frenar a CR7.
Los blancos, con Isco por Bale en el once, empezaron buscando el gol con muchas ganas. El Atleti se replegó y eso hizo que el Santiago Bernabéu disfrutara de las primeras ocasiones de la noche.
Cristiano, Cristiano y Cristiano
Aunque hubo un par muy claras, el primer gol no subió al marcador hasta el minuto 10, cuando Casemiro empalmó un balón que acabó en la cabeza de Cristiano, que no tuvo problemas para superar a un Jan Oblak que poco pudo hacer para evitar el tanto.
El Atlético también tuvo alguna que otra en el primer tiempo, aunque la más clara fue nuevamente para el Madrid. Oblak volvó bajo para evitar que Raphael Varane hiciera el segundo a la salida de un córner que remató magistralmente aprovechando su envergadura. Más tarde fue Karim Benzema quien la tuvo en un remate acrobático a centro de Cristiano.
El guión no cambió tras el descanso. Los rojiblancos, ayer de negro y amarillo, parecieron dar por bueno el resultado y apenas se abalanzaron sobre la portería de un Keylor Navas que no se manchó mucho los guantes.
Los minutos pasaban y el 1-0 seguía en el electrónico, hasta que Benzema se hizo con un balón en la frontal del área a espaldas de la portería rival. El francés aguantó la entrada de Diego Godín, que acabó por los suelos, y asistió a Cristiano, que con algo de suerte se hizo con el balón y disparó lo más rápido que pudo. Fue un trallazo ante el que Oblak no pudo hacer mucho.
Eso pasó en el minuto 73, y en el 86 llegó el gol que podríamos decir que ha sentenciado la eliminatoria. La jugada se coció por banda derecha, donde Lucas Vázquez explotó su velocidad para apurar la línea de fondo antes de ponerla atrás. Por allí apareció Casemiro, que la dejó pasar a sabiendas de que Cristiano andaba por allí con ganas de firmar otra noche mágica en Champions. Su remate, tras controlar con toda la tranquilidad del mundo, pasó por debajo de las piernas de Stefan Savic y acabó con el esférico alojado en el fondo de las mallas.
Zidane pide calma
El Bernabéu celebró el gol como si el equipo ya estuviera en la final. Zidane entiende la euforia, pero no quiere dar por muertos a los de Simeone y sabe que les tocará sufrir en la última noche europea que se vivirá a orillas del Manzanares. Para la duodécima todavía quedan dos partidos.