El Manchester United no pudo llevarse ayer el triunfo en Marsella. El Olympique jugó un partido muy serio y mantuvo el orden en todo momento, dejando muy pocos espacios atrás y casi conformándose con un resultado que la verdad es que no es del todo malo. El partido de vuelta de estos octavos de final de la Champions League promete ser muy interesante. Old Trafford tendrá la última palabra y no hace falta decir que los ingleses son favoritos.

Sin duda alguna fue uno de los partidos más aburridos de la jornada. Ninguno de los dos equipos gozó de claras ocasiones para marcar, por lo que podemos decir que el resultado final de 0-0 fue el más justo de todos. Gabriel Heinze estuvo inconmensurable por parte de los franceses, mientras que Wayne Rooney estuvo desaparecido por completo. Seguro que en el partido de vuelta se echará el equipo a la espalda.