La selección española dejó pasar una oportunidad única para afianzar su liderato en el grupo G de la fase de clasificación para el Mundial de Rusia. Los de Julen Lopetegui se pusieron por delante en el marcador en la segunda parte, pero un penalti infantil de Sergio Ramos tiró todo el trabajo a falta de 8 minutos para el final.
Un buen partido sin pegada
‘La Roja’ se sintió muy cómoda en el Juventus Stadium. Cuajó una gran primera parte y pudo superar a Gianluigi Buffon, pero los transalpinos resistieron y se fueron al descanso con un marcador que no les iba nada mal visto lo visto en el terreno de juego.
Faltó lo de casi siempre. Faltó un jugador capaz de definir. Diego Costa está entonado con el Chelsea, pero todos sabemos que en la selección no acaba de sentirse a gusto. El estilo de juego de los de Lopetegui, similar al de Vicente del Bosque, sigue siendo demasiado conservador y no da pie a los contraataques.
El desliz de un veterano
El gol que abrió la lata llegó en el minuto 55 y fue obra de un jugador que se ha asentado en el once inicial. Vitolo superó a un Buffon que se equivocó a la hora de ir a despejar un buen pase a la espalda del canario, que sorprendió ganándole la espalda a la defensa italiana por el centro. El portero de la Juventus no le dio al balón y éste quedó en inmejorable posición para que Vitolo lo enviara al fondo de las mallas.
Ramos para lo bueno y para lo malo
Cuando parecía que los tres puntos iban a volar hacia España, los de Giampiero Ventura se beneficiaron del grave error de Sergio Ramos, que de vez en cuando mete la pata. Es uno de los mejores centrales del mundo, por no decir el mejor, pero a veces demuestra tener muy poca inteligencia.
Su zancadilla a Éder fue clarísima. Llegó tarde y el árbitro le castigó con la pena máxima, aunque no le mostró la segunda cartulina amarilla que le habría enviado a la ducha antes de tiempo. Los italianos se comían al alemán Felix Brych, que perdonó al de Camas.
Un gato viejo como Daniele De Rossi se encargó de lanzar el penalti engañando a un David de Gea que igual se tiró demasiado rápido. Los italianos respiraban porque con este resultado siguen con los mismos puntos que España, la otra gran favorita para acabar primera de grupo y obtener el billete directo para el Mundial 2018.