Primera debacle del Real Madrid en lo que va de Liga. Llega muy pronto, porque solo se han disputado dos jornadas, pero es un buen indicador de que el equipo todavía no está en perfectas condiciones. Y si a eso le sumamos la baja de Cristiano Ronaldo, el resultado puede ser tan catastrófico como el que cosecharon anoche en Anoeta.
La Real Sociedad les pasó la mano por la cara. Perdían por 0-2 en el minuto 11, pero fueron capaces de reaccionar a tiempo y se aprovecharon del pasotismo de un equipo que ya no tiene a dos purasangres como Xabi Alonso y Ángel Di María. Seguro que más de uno se acordó de ellos cuando los goles de la Real subían al marcador con suma facilidad.
Minutos de oro del Madrid
Sergio Ramos hizo el 0-1 tras rematar de forma magistral un lanzamiento de esquina botado por Toni Kroos, que como viene siendo habitual las pone con música. El segundo llegó poco después, cuando Gareth Bale se inventó un caño dentro del área para dejar sentado a Elustondo y batir a Zubikarai con un disparo ajustado al poste.
El Madrid lo estaba bordando y Carlo Ancelotti lo celebraba desde el banquillo, pero las cosas cambiaron de forma inesperada y el Madrid no fue capaz de matar el partido con un tercer tanto cuando tuvo la ocasión de hacerlo.
Zurutuza, el ‘9’ inesperado
Íñigo Martínez recortó distancias en un lanzamiento de esquina y Zurutuza puso las tablas con un espectacular remate de cabeza en el que se jugó el físico. Con el 2-2 se llegó al descanso y cualquier cosa podía pasar en la segunda parte.
Los de Jagoba Arrasate no se conformaron con el empate y fueron a por la victoria desde el primer minuto, todo lo contrario de lo que vimos en los rostros y en la actitud de los jugadores del Madrid. Se mostraron muy apáticos y se equivocaron por enésima vez en el tercer tanto. Primero por una mala presión de Sergio Ramos en banda izquierda. Se fue a por Sergio Canales y dejó un carril libre que supo aprovechar Xabi Prieto para colocar un centro de la muerte que Zurutuza convirtió en el 2-3.
Vela puso la guinda
Anoeta enloquecía y quería más. La Real se estaba comiendo al actual campeón de Europa y desde la banda Ancelotti no tenía material para arreglar el entuerto. Dio entrada a Sami Khedira y Álvaro Arbeloa, pero como es lógico las cosas no cambiaron. Todo lo contrario. Llegó el 4-2 de Carlos Vela en el minuto 75 y se consumó una derrota que escuece mucho e invita a reflexionar.