Lo de Karim Benzema es increíble. No voy a decir que merecía el Balón de Oro 2021, pero es evidente que el francés está en el mejor momento de su carrera profesional a sus 34 años. Se habla mucho de Kylian Mbappé y de Haaland, pero lo cierto es que a día de hoy el Real Madrid no necesita ningún delantero para cubrir sus necesidades goleadoras. Eso sí, al igual que todos los jugadores del mundo tiene fecha de caducidad, y dudo que pueda aguantar más de dos temporadas a este nivel por mucho que se cuide.
Si merece ver fútbol en la tele a día de hoy tras las marcha de Leo Messi al PSG, es gracias a jugadores como Karim, Vinícius o Gavi. Auténticos fenómenos que son capaces de poner en pie a todo un estadio. ¿La última exhibición del ‘9’ blanco? La de ayer en La Catedral.
Dos dianas que definen su calidad
El Madrid ganó por 1-2 al Athletic de Bilbao gracias a los dos goles que marcó en apenas 10 minutos. Los vascos trataron de reaccionar con un golazo de Sancet, pero no pudieron evitar el triunfo de un equipo que va disparado hacia el título de liga, a menos que el Sevilla sea capaz de ser muy regular y dar la campanada.
Carlo Ancelotti debe hacer todo lo posible por administrar los minutos que juegan sus mejores futbolistas, como es el caso de Benzema. Conviene llegar fresco al tramo final de campeonato y estar en las mejores condiciones para pelear por la Champions League, donde ya saben que tendrán que medir sus fuerzas al todopoderoso PSG de Messi, Ramos, Mbappé, Neymar y compañía.
El calendario que tiene por delante el Madrid en las próximas jornadas le invita a pensar en un arreón más con el que dejar prácticamente finiquitada LaLiga. Habrá que ver cómo compaginan la necesidad de mantenerse fuertes en el campeonato doméstico con la importancia de las grandes citas de la Champions. Ancelotti tendrá que tirar de fondo de armario sabiendo que hay futbolistas como Isco o Bale que como mucho están para jugar la Copa del Rey.