Más le vale a Bartomeu que los que están se pongan las pilas. El presidente del Barça está en el ojo del huracán tras la mala gestión llevada a cabo durante el mercado de fichajes, que se ha cerrado con una única incorporación de renombre, la de Ousmane Dembélé.
El club ha hecho caja, desde luego, y eso que ha pagado una burrada por un futbolista que todavía no ha demostrado nada. Es evidente que Dembélé tiene mucho talento y seguirá creciendo, pero no menos cierto es que han desembolsado una cantidad desorbitada por un jugador que no se ha fogueado en una gran liga. Por eso, y porque se les han escapado otros jugadores que estaban en el punto de mira, podríamos decir que los aficionados están con los pañuelos en la mano para dedicarle una pañolada a la que las cosas se tuerzan un poco.
Malos negociadores
Cometieron un grave error tras ingresar los 222 millones de euros que pagó el PSG por Neymar. ¿Cuál? El de anunciar a bombo y platillo que querían a Dembélé y Coutinho. Si dices eso con tanto dinero en el bolsillo, lo más normal es que te pidan una cifra indecente por los dos. Y eso es lo que ha pasado, solo que el Liverpool no ha querido negociar por el brasileño, al que declararon intransferible desde el primer día.
Verratti fue el primer chasco
Antes de que la marcha de Neymar acelerara los acontecimientos, el nombre que sonaba con más fuerza era el de Marco Verratti, al que tenían medio convencido. El PSG tampoco quiso sentarse a negociar y el Barça no estaba dispuesto a tirar la casa por la ventana. Entre una cosa y la otra, el interés se fue evaporando y la venta de Neymar hizo que el objetivo cambiara por completo.
El «no» del Liverpool y el feo a Seri
Pensaban que Dembélé y Coutinho estaban en el bote y se equivocaron. El francés sí que iba a llegar porque el Borussia Dortmund alucinaba con la cantidad que iban a recibir por él, pero lo de Coutinho se atascó y tuvieron demasiada fe hasta el final. Tanto que cuando se dieron prisa y sondearon otras opciones, como las de Thomas Lemar y Ángel Di María, ya era demasiado tarde. Además, también le pusieron el caramelo en la boca a Jean Michael Seri, centrocampista del Niza que fue descartado cuando ya estaban preparando su llegada a la Ciudad Condal.
El aficionado del Barça esperaba un pelotazo como el de Coutinho antes del cierre del verano. Un pelotazo con el que compensar la fuga de Neymar, aunque ni Dembélé y Coutinho juntos son capaces de contentar a alguien que entiende de fútbol. Han perdido al que probablemente sea el mejor jugador del mundo en los próximos años y eso duele mucho por mucha moto que te quieran vender.
Cuidado porque Messi todavía no ha renovado…
Ahora hay otro tema que preocupa a los culés. ¿Qué pasará con Leo Messi? En principio su continuidad está asegurada, o al menos eso dicen los directivos del Barça. Pero claro, han dicho tantas cosas que después no se han cumplido… Da la sensación de que el ’10’ renovará cuando quiera, si es que renueva. Puede que espere unos meses para ver cómo les va, y si los resultados no acompañan no deberíamos descartar que pudiera irse al Manchester City con la carta de libertad bajo el brazo, algo que por otra parte me parecería muy extraño, ya que Messi siempre ha estado en deuda con el Barça y marcharse sin dejar ni un solo euro sería poco agradecido.